Expositions et parcours de visite accesibles

Sandrine Sophys-Véret (coorD.)

Collection Culture et handicap. Ministère de Culture et de la Communication, París, Francia, 2017.

.

Reseña de Cristina Vargas Pacheco

doi: https://doi.org/10.21754/devenir.v10i19.1709

Expositions et parcours de visite accesibles (2017) es la última de las cuatro guías publicadas por el Ministerio de Cultura y de la Comunicación de Francia desde 2007, que abarcan diferentes ámbitos de la dinámica cultural, desde una perspectiva de equidad en el acceso y disfrute de los derechos culturales.

Esta publicación se soporta en marcos normativos y políticos mayores que desde los inicios del nuevo milenio buscan robustecer la democratización de los espacios y la oferta de cultura, enfatizando en aspectos como la discapacidad y la accesibilidad en los establecimientos culturales, a partir de la creación de la Comisión Nacional de Cultura y Discapacidad de Francia (2001). Sus raíces pueden rastrearse en la Recomendación sobre los medios más eficaces para hacer los museos accesibles a todos, surgida en el seno de la Unesco, en 1960 y en Des musées pour tous: manuel d’accessibilité physique et sensorielle des musées (1992).

La guía se concentra en un aspecto museístico esencial —lo expositivo—, asociado a lo espacial pero intrínsecamente vinculado a los usuarios y a las colecciones. El documento entiende la museografía como un quehacer donde convergen la arquitectura y la escenografía (Desvalées y Mairesse, 2010, p. 56), pero con una mirada más articuladora que piensa en el espacio relacionado con la conservación de las colecciones, los públicos y su llegada, desplazamiento y su aprehensión del museo. Y allí es donde la accesibilidad aparece de manera transversal como “un método, un diálogo y un accionar” (p. 5), que atañe al personal museal y aspectos más programáticos, como las políticas institucionales y la voluntad de su implementación, buscando mayor diversidad de públicos y soportándose en la inclusión.

El preámbulo plantea sucintamente el deber ser de la “accesibilidad” y se organiza en dos capítulos que aluden al proyecto expositivo y a su ejecución, bajo las premisas de la “responsabilidad y el compromiso”, así como a los elementos que requiere una exposición. Comprende que la accesibilidad debe pensarse holísticamente y que su planificación e implementación supone un proceso iterativo y creativo, donde el factor económico es necesario, pero no invalidante, pudiendo implementarse progresiva y programáticamente. Subraya, además, que debe preverse desde el origen del proyecto, aunque, de no suceder así, debe considerar su implementación más eficaz. Esta mirada previsora —bastante frecuente en los más recientes manuales— es concordante con la renovada preocupación por los públicos y ha gestado en algunos países relevantes museísticamente como Brasil, que se considere con un programa específico dentro del plan museológico. Las secciones más técnicas del documento entienden que el éxito de su concreción pasa por contar con un equipo profesional que lleve adelante el proyecto, subrayándose así la relevancia, compartida a nivel del sector, de la formación museológica-museográfica. Luego, presenta los elementos técnicos necesarios para generar visitas accesibles en cuanto a la señalética, mobiliario, iluminación, uso del color, etc., desarrollados con un énfasis en su aproximación multisensorial a la exposición. Sin embargo, el museo accesible supondría aún más. Al respecto, destacan dos aspectos innovadores: el primero, asociado a una mirada realista y gestora, como es la de la necesidad del financiamiento, proponiendo diferentes opciones previstas por la legislación francesa como el mecenazgo, el financiamiento participativo o crowdfunding, así como la sinergia con universidades para la investigación, o con empresas creadoras de TIC. El segundo, relieva una mirada ampliada de la accesibilidad desde la mediación cultural, incluida la del tipo digital o numérique y que acorta las barreras físicas de acceso, conectando, además, con la accesibilidad comunicacional, cognitiva y web. Después de todo, la exposición es una mediación y las vastas posibilidades que se abren con el museo en lo digital no escapan a esta publicación, sino que la erigen como factor de una participación ciudadana.

Finalmente, esta guía nos recuerda que el museo es un espacio a ser vivido de múltiples formas que rememoran aquellas plasmadas en Museum Hours (2012), película de Jem Cohen, las cuales demandan espacios accesibles, seguros y confortables…

A partir de todo lo dicho, bien vale el esfuerzo de la revisión de esta guía por su visión integral de la accesibilidad. En el Perú, una preocupación ulterior por la accesibilidad en nuestros museos ha llevado a su incorporación, en 2024, dentro de los objetivos del Plan Nacional de Accesibilidad (2018-2023 y ampliado recientemente) y puede seguir enriqueciendo las reflexiones para que nuestros museos sean de todos y para todos. Disponible en: https://www.culture.gouv.fr/Thematiques/Developpement-culturel/Culture-et-handicap/Guides-pratiques/Expositions-et-parcours-de-visite-accessibles-2017

Referencias

Decreto Supremo N°003-2024-VIVIENDA. Decreto Supremo que aprueba la continuidad al 2025 del Plan Nacional de Accesibilidad 2018-2023 y el Anexo (Matriz de Metas 2024-2025). El Peruano, 27 de febrero de 2024.

Desvallées, A. y Mairesse, F. (2010). Conceptos claves de Museología. ICOFOM.

Ministère de la Culture (1992). Des musées pour tous: manuel d’accessibilité physique et sensorielle des musées. Direction des musées de France.